Este artículo nace de mis últimas reflexiones al observar que cada vez más novatas/os en el mundo del Tarot se desaniman rápidamente. Y este desánimo no tiene que ver con que el Tarot sea difícil en sí, sino con la cantidad de sobreinformación que abruma y confunde.
Todos queremos dominar las cartas, pero no nos damos cuenta de la verdadera profundidad que requiere, del compromiso y, sobre todo, de la paciencia.
1. Es normal que al principio te ates a una guía: no desesperes, no está mal que al principio busques en libros y guías y te "ates" a definiciones estáticas. Con el tiempo es probable que aprendas que ningún libro o guía tiene razón, pero a la vez todos la tienen. Lo que quiero decir con esto es que el Tarot nunca es un "o esto o lo otro" sino un "ambos/y", y este es uno de los secretos más maravillosos de esta herramienta: ninguna verdad es absoluta, por lo que más de una es posible. Aquellas personas que hacemos Tarot hace tiempo acumulamos la mayor cantidad de información posible para alquimizarla en nuestra propia comprensión individual de las cartas, es por eso que no importa cuántas veces observe una misma carta, casi siempre quiere decir algo diferente - y por eso suelo decir que para mí las cartas no tienen un significado. Pero cuando recién estás empezando es normal que, en lugar de generar tu propia alquimia de "significados", busques el significado "correcto". Cada nuevo mazo viene con una nueva guía y una nueva interpretación, lo que puede generar confusión, mi consejo es que durante las primeras semanas o meses utilices un recurso - libro, guía, apuntes de un curso - como referencia mientras leés.
2. No le creas a todo el mundo en Internet y Redes Sociales: llenar tu Instagram de Tarot Lovers es una re idea para seguir aprendiendo y desarrollando, pero al igual que cuando nos quedamos atascados en qué guía es la "correcta", nos quedamos atascados en qué lector/a de TikTok es "correcto/a", y esto solo conduce a la frustración. El Tarot es una herramienta sagrada y un portal hacia lo más profundo del ser, procurá alinearte con personas que traten al Tarot con el respeto que se merece y desconfiá de aquellas personas que sentencian tu vida o la condicionan.
3. Leerse a una/o misma/o no es tarea fácil: y aunque está bastante demonizada la autolectura, yo apoyo la idea de que las hagas siempre, pero reconozco que no es fácil puesto que el Tarot entrega mensajes inconscientes y nuestra mente consciente y ego siempre luchan por tener el control. Sí siento que las autolecturas son claves para comenzar a "domar" a tu ego y a tu mente consciente, es como decirles "ok, acá vine yo a trabajar en lo profundo de mi inconsciente, permiso, ahora no requiero de sus servicios". Para esto será importante que saques de tu mente la idea de que el Tarot es una especie de varita mágica que resolverá todos tus problemas y hará tu vida perfecta. No te va a pasar de sacar, por ejemplo, al Mago y decir: "claro, si bajo esto del cielo a la tierra y me hago consciente de mis recursos internos dominaré el resto de mi vida y seré una eterna maga y ama de la alquimia, entonces trabajaré de lo que amo, mi familia me va a entender, conseguiré la pareja ideal y bla bla bla". No funciona así. En cambio, sacar el 10 de espadas cuando estás estresada/o te incitará a la reflexión y a volver despacio a tu centro. Así es como se vuelve más sencillo y dinámico: estate abierta/o a recibir preguntas en lugar de exigir respuestas.
4. Conseguí el mazo con el que más resuenes energéticamente: y sé que esto puede sonar muy "biri biri", pero nadie más que vos siente un flechazo al ver un mazo, ese momento en el que lo ves y sabés que es ese. Antes de elegir mi primer mazo pasé horas en YouTube viendo reseñas. También te recomiendo, al principio, elegir mazos sencillos, y no me malinterpretes: podés leer con cualquier mazo, pero cuando recién empezás quizá menos es más y los símbolos son importantes - te recomiendo algunos de mis preferidos en el artículo: ¿Con qué mazo de Tarot empiezo? Si elegís empezar con uno muy complejo, te recomiendo utilizar su guía para darle sentido al simbolismo particular.
5. Nunca se trata de memorizar: entiendo que quieras hacer lecturas sin acudir a una guía por muchas razones, pero memorizar palabras clave no es la solución en ningún caso. Por otro lado, te recomiendo llevar un journal o diario de Tarot en donde puedas apuntar tus observaciones sobre las cartas y reflexionar en ellas. También que vayas de a poco: una carta puede contener toda la información que necesitás, sacar 20 cartas no es sinónimo de mejores lecturas. Dejá que tu lectura de las cartas sea interpretativa, intuitiva e íntima, y la dominarás mucho más rápida y profundamente.
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